Entrevista a Takako Kunigoshi:
Primera instructora de Aikido. Discípula directa de O-Sensei.
Tomado de:
Traducción y links : JoseGregorio
La siguiente
entrevista a Takako Kunigoshi se llevó a cabo el 26 de agosto de 1981, en su
casa en el área de Ikebukuro en Tokio. Kunigoshi Sensei se desempeña como
instructora de arreglo floral y de ceremonia del té.
Editor: Kunigoshi
Sensei, ¿Cuándo se relacionó por primera vez con el Aikido?
Sensei: Empecé en
enero de 1933, el año en el que me gradué de la escuela. Continué hasta poco
antes de que los ataques aéreos comenzaran sobre Tokio. En ese tiempo me habían
pedido enseñar defensa personal a las empleadas de una empresa ubicada junto a
la famosa lun Kaminari (Thunder Gate) del Templo de Asakusa, en el casco
antiguo de Tokio. Fui allí como instructora con la nieta de Yakumo Koizumi
(famoso autor del periodo Meiji, más conocido por los lectores extranjeros,
como Lafcadio Hearn), la Sra. Kazuko Koizumi, ella y yo enseñamos juntas. Ella
ya murió. Luego del comienzo de los ataques aéreos hubo muchas advertencias y
alarmas y las cosas estaban un poco peligrosas, así que tuvimos que parar. No
llegamos a entrenar mucho allí.
Editor: ¿Entrenaron
ustedes en el Dojo Ushigome (actual Hombu Dojo)?
Sensei: Sí así es.
Fue el dojo que me solicitó enseñar en Asakusa.
Editor: Me imagino
que no había muchas mujeres entre los deshi (alumnos) en aquellos días.
Sensei: Éramos sólo
dos mujeres! La otra mujer era dos o tres años más joven que yo. He recibido cartas de felicitación de Año Nuevo de ella hasta hace
unos pocos años. Aunque ahora parece que un sobrino suyo va a entrenar al dojo.
Pero como usted ha dicho, en esos días no muchas mujeres iban a entrenar.
Siempre fue así, pero el maestro Ueshiba nunca me hizo sentir diferente
cambiando las cosas "por ser mujer".
Editor: ¿Quién fue
el que la introdujo en el arte?
Sensei: En mi caso,
nadie en especial me introdujo. Yo fui por mi propia cuenta, en mi camino a la
escuela por la mañana, a la clase de 6:30 a.m. ¿Usted por casualidad conoció al
difunto maestro Kenzo Futaki? Él era un maestro de dieta macrobiótica basada en
arroz integral. Yo solía ir con él. Él ha muerto también. Las cosas no eran
como ahora, pues el arte no era tan conocido. Yo diría que había alrededor de
seis o siete uchi-deshi que vivían y dormían en el dojo y probablemente el
mismo número de personas que iban a entrenar desde sus hogares. Si ningún uchi-deshi
estaba despierto no se podía entrar en el dojo y debíamos esperar afuera en el
frío! (risas)
Editor: ¿Quiénes
eran los uchi-deshi en esa época?
Sensei: Eran el Sr.
Yonekawa, el Sr. Shirata, el Sr. Funahashi y el fallecido Sr. Yukawa. Luego
hubo una persona que vino de Osaka que se llamaba el señor Oku. Tal vez el Sr.
Yonekawa era el más viejo entre nosotros. El año pasado él y yo hicimos un
viaje al Santuario Kasama Inari, juntos, en nuestro regreso a casa de la
ceremonia que se llevó a cabo para conmemorar el 10º aniversario de la muerte
de 0-Sensei.
Editor: Hace un par
de años escuché un par de historias maravillosas del Sr. Yonekawa. ¿Podría
usted, Sensei, confirmar si en esa época se usaba la palabra Aikido? Creo que
en esa época se le llamaba Daito Ryu.
Sensei: ¿Daito-Ryu
Aiki-Jujutsu? Creo que era algo así, porque he recibido un pergamino (makimono)
titulado Daito Ryu. A mí me parece que el nombre de Aikido se empezó a usar
hasta un poco antes de la guerra. Era casi como si el nombre de Aikido hubiese
sido pensado para nombrar al Daito Ryu. Más tarde, cada vez que me preguntaron
al respecto, yo siempre respondía que pertenecía a la tradición de Sokaku
Takeda Sensei (ryu).
Editor: ¿De qué
forma explicaba Ueshiba Sensei las técnicas de Aikido durante sus sesiones de
entrenamiento?
Sensei: No
importaba qué cosa le preguntáramos, creo que siempre se obtenía las mismas
respuestas. Como sea, no había un alma allí que pudiera entender con claridad
todas las cosas que dijo. Supongo que él estaba hablando acerca de temas
espirituales muy profundos, pues el significado de sus palabras era algo muy
adelantado para nosotros. Más adelante nos formábamos en círculo y nos
preguntábamos unos a otros, "¿De qué era lo que hablaba Sensei?".
Editor: Esta es una
copia del libro titulado "Budo Renshu". Se volvió a publicar hace
unos dos o tres años. Estoy seguro de que usted, Sensei Kunigoshi, está
relacionada con él.
Sensei: ¡Yo hice
las ilustraciones! Tomiki posó para ellas. Todos los días, justo después de la
práctica las dibujé. Cuando estaba a punto de terminar de entrenar y salir
corriendo del dojo yo le gritaba "¡Alto!" para que no fuera más
lejos. En pocos segundos yo dibujaba lo que estuviera haciendo. Luego, más tarde,
en mi casa, me dedicaba a terminar los detalles. Naturalmente, mi familia a
menudo me preguntaba: "¿Qué diablos estás haciendo?" mientras yo
estaba de pie, rígida frente a un espejo, tratando de recrear una pose o una
actitud para tomarla como referencia en los dibujos. (risas)
Editor: ¿Cuándo fue
publicado este libro por primera vez?
Sensei: Empecé a
principios de 1933 y fue después de un año que terminamos el libro, así que
supongo que habrá sido alrededor de 1934. ¡Estas ilustraciones eran realmente
difíciles de hacer! Tenía que hacer todo dos veces, ya sabes. El segundo libro
nunca fue publicado, después de todo, pero en cualquier caso, esta versión en
particular cuenta con los primeros dibujos.
Editor: Akazawa
Sensei tuvo la amabilidad de mostrarnos otro libro titulado "Budo",
impreso alrededor de 1938, que contiene fotografías en vez de dibujos.
Sensei: Yo no
estuve involucrada en ese trabajo, pero estoy seguro de que las fotos son
mejores que los dibujos para la mayoría de la gente. ¿Fue en 1938? ¡Mira cómo
estaba de joven el señor Kisshomaru (Ueshiba) en ese entonces!
Editor: ¿Recuerda
cuántos ejemplares del libro “Budo Renshu” fueron impresos?
Sensei: Bueno, esa
es una buena pregunta. Yo no tenía nada que ver con esa parte. Me pregunto
quién era el que se encargó de eso. Tal vez el Sr. Yonekawa. De todos modos, el
libro se daba sólo a aquellas personas que ya habían dominado los principios
básicos, hasta cierto punto. Sensei siempre nos recordaba que "Si alguien
que acaba de entrar en el dojo trata de entrenar así se lesionará, por lo que
nunca se debe mostrar esta información a un principiante."
Editor: ¿Quién
escribió las explicaciones que acompañan sus dibujos?
Sensei: Creo que un
amigo, Mr.Takamatsu, las escribió para nosotros. En otros casos Ueshiba Sensei
y yo nos sentábamos juntos y Sensei me mostraba y me decía cosas como "la
mano derecha debería ir así" o decía "esto más como esto", y de
esta manera nos acercábamos juntos a la imagen deseada.
Editor: Hay un buen
número de técnicas en este libro. ¿Cuánto tiempo tomó todo el trabajo?
Sensei: No creo que
nos llevara más de un año. Hubo momentos en los que O-Sensei de repente decía:
"Es suficiente por hoy" y nosotros simplemente nos deteníamos. Nada
se hacía mientras él no estuviera al frente del trabajo.
Editor: Justo hasta
su muerte O-Sensei viajó ampliamente a través de Japón. ¿Lo acompañó usted en
alguno de sus viajes?
Sensei: Sí, yo fui
con él a Ayabe (sede de la religión Omoto, cerca de Kyoto) y a Tanabe (lugar de
nacimiento O-Sensei y residencia de su familia) y a un par de otros lugares. A
continuación, a partir de ahí seguimos a Kumano (un área en las montañas y
lugar de un gran y famoso santuario asociado con O-Sensei y sus creencias
shintoístas) para dibujar. El dibujo fue una de las razones por las que me llevó
en sus viajes. En los viejos tiempos no había absolutamente ninguna distinción
en la relación con los Deshi porque algunos eran hombres y otros mujeres. Una
vez otro deshi y yo hicimos un viaje a la región Kishu junto con O-Sensei. En
primer lugar nos fuimos a Tanabe, a continuación, hasta Ayabe y, finalmente, de
Kyoto. En el momento en que llegamos a la antigua capital yo era la única
persona que seguía allí con él. Supongo que hoy en día la gente simplemente
decide no llevar el equipaje pesado de otro y a los maestros les toca cargar
sus propias cosas, pero en esos días una persona que se llamaba a sí mismo
"Deshi" fuera mujer o no, nunca se le ocurriría permitir que su
maestro llevará sus propias cosas; así que yo estaba cargando una maleta casi de
mi tamaño junto con mis propias bolsas. Bueno, yo cargaba lo que debía ser
cargado, pero esa vez mis pies ni se levantaban de la tierra. Aún así O-Sensei
nunca dijo "supongo que es bastante pesada, déjame llevarla." Yo
nunca le hubiera permitido hacerlo. O-Sensei nunca cargó nada más que su
pequeño bolso y una espada. Esa vez, sin embargo, la carga era muy pesada para
mí (risas).
Editor: Sensei
Kunigoshi, ¿Qué la motivó en primer lugar a entrenar Aikido?
Sensei: Yo había
querido estudiar Kembu, un estilo de baile que usa la espada y más o menos
recrea los movimientos de combate. Mi padre era soldado y me recomendó ir al
dojo Wakamatsu-cho. Algunos amigos y yo fuimos allí y dijimos que queríamos
estudiar Kembu. Allá nos contestaron "Nosotros no hacemos Kembu aquí,
hacemos Aiki jo, y hay una sesión de entrenamiento ahora, tal vez les gustaría
observarla un rato". Después de eso, me enganché.
Editor: ¿Cuántas
sesiones de entrenamiento al día había en aquel entonces?
Sensei: La primera
era la clase de 6:00 am y había otra práctica en la mañana aproximadamente a
las 10:00 am. Para las personas que trabajaban durante el día había otras tres
sesiones durante la noche. Los uchi-deshi podían entrenar en cualquiera de esas
clases.
Editor: ¿La hija de
Ueshiba Sensei, Matsuko, entrenaba en ese entonces?
Sensei: No, ella no
venía mucho a entrenar. Personalmente, he tenido muy pocas oportunidades de
hablar directamente a la Sra. Matsuko. Su casa estaba conectado con el dojo,
por lo que solía aparecer e invitarnos a tomar el té o decir: "Tenemos un
montón de comida de sobra, ¿alguien quiere quedarse a comer aquí?" y así
podíamos quedarnos y disfrutar de una buena comida. Aun así, nunca he tenido la
oportunidad adecuada para hablar de su vida o acerca de su formación.
Editor: ¿Por
casualidad tiene fotografías de la época?
Sensei: En aquellos
días las cosas eran distintas y no se tomaban fotos con frecuencia. Me parece
recordar un momento en el que todos se habían reunido en el dojo por una razón
u otra, y todos nos formamos delante del dojo para una foto de recuerdo. Pero
esa fue la única. Me pregunto dónde habrá ido a dar. No tuvimos muchas
oportunidades y ocasiones para tomar fotos, en realidad.
Editor: Aunque
supongo que no, ¿Kisshomaru Sensei entrenaba en ese momento?
Sensei: Durante el
tiempo que me es familiar él había entrado en la escuela secundaria, no lo recuerdo
con certeza, así que no creo que él hubiese comenzado a entrenar. Fue a la
escuela al lado del Jardín imperial Shinjuku. Hoy en día se le conoce como High
Shinjuku pero hace años era conocido como la Escuela media Número Seis. Creo
que él comenzó a entrenar después de que se graduó de esa escuela.
Editor: ¿Cómo
compararía el Aikido como lo recuerda, en el Hombu Dojo, con el Aikido que se
hace hoy en día?
Sensei: Tal vez sea
porque había tan poca gente alrededor, pero la sensación era mucho más madura e
íntima a la vez. Ahora hay más la sensación de una escuela, en la que usted
paga honorarios y viene y asiste a clases a tal hora. No creo que sea así a
propósito, pero esa es la atmósfera que se siente.
Editor: ¿Cuando
usted entrenaba se pagaban mensualidades?
Sensei: No, no era
así. En los viejos tiempos el maestro y el deshi eran como una unidad. En aquel
entonces se podría decir, "Hola a todos me acabo de comprar unos
panecillos dulces. Vengan y coman”, creo que eso sería un poco difícil de hacer
ahora. Y como ya he dicho la esposa de Sensei podía tener una comida preparada
para nosotros y a cambio nosotros dejar completamente limpio el dojo. Al
terminar jugábamos durante una hora o dos en el dojo. Son cosas que nos hacían
sentir como si estuviéramos todos en familia. En cuanto a números, estoy segura
de que no habíamos ni de lejos, una quinta parte del número de personas que hay
hoy en día. A veces alguien arreglaba algunas flores en el hall de la entrada,
cosas así.
Editor: Ahora las
cosas son diferentes y por lo tanto debemos consignar esos sentimientos del
pasado. Aun así, es maravilloso que todavía mantenga contacto con sus amigos de
aquella época.
Sensei: Bueno,
éramos tan pocos que nuestros lazos se hicieron muy fuertes. Supongo que ahora
los grupos son tan grandes que nadie sabe quién va o viene, pero recuerdo que
en esa época si alguien decía: "Tengo que ir al campo, pero no tengo el
dinero," de inmediato otro miembro diría, "no te preocupes, voy a
prestarte un poco" y cosas así.
Editor: ¿En esos
días los alumnos recibían grados Dan (grados de cinturón negro) por parte de
O-Sensei?
Sensei: Con
respecto a eso, lo primero que recibí fue un rollo de transmisión llamado
mokuroku. Ueshiba Sensei me dijo: "En realidad, yo debería copiar esto y
dárselo a usted, pero no tengo el tiempo, así que por favor tome lo que digo y
cópielo usted misma”. Así que tengo un makimono
que he copiado yo misma. Si tuviéramos que explicar lo que significa el
makimono supongo que podría decir que fue el equivalente a alguna calificación
de dan. Más tarde oí comentar que yo era Sandan (tercer grado de cinturón
negro) y aunque en ese momento yo respondí que no había recibido nada como eso
parece que de alguna manera en el dojo ahora aparece mi nombre con esa
graduación. En realidad, fui una vez para averiguar al respecto y por supuesto
que era verdad. Todavía me pregunto cuando pasó (risas). Yo no me enteré porque
cuando entrenaba no había nada como los grados de dan, así que me sorprendió
bastante.
Editor: Hemos visto
videos antiguos en los que se utiliza el Juken en las exhibiciones. ¿Alguna vez
usó el Juken (bayoneta), en la práctica en ese momento?
Sensei: Sí, lo
hacíamos. Alguien usaba ese tipo de arma durante el entrenamiento y nosotros
íbamos a tratar de hacer frente a ese tipo de ataque. También hemos trabajado
en contra de ataques con lanza. De todos modos, en el dojo había casi cualquier
tipo de arma. Practicábamos en contra de un ataque de corte hecho con el bokken
y no sólo se esperaba que fuéramos capaces de evitar los ataques de personas
armadas; también se esperaba que fuéramos capaces de tomar el papel del
atacante y manejar las armas. Cuando se corta, el arma debe generar un sonido
silbante, pero a la primera no es tan fácil obtener un sonido perfecto. Sale
más un sonido sibilante bajo (risas). Después de un año o algo así, sin
embargo, fui capaz de conseguir un buen ataque.
Justo en el momento
que comenzó la guerra, mi alma mater fue de vacaciones de verano y yo pasé algo
así como tres días enseñando algo más parecido a la auto-defensa que al Aikido.
El grupo era de unas 50 personas y sólo éramos dos instructores. Yo tenía que
cuidar, de 30 de ellos. Eso significaba que tenía que ser uke para todos ellos
uno tras otro, bum, bum, bum. Eran las vacaciones de verano y hacía un calor
terrible, por lo que yo estaba sudando como si estuviera lloviendo. Yo siento
que si se va a enseñar se debe ser capaz de también tomar el lado del uke. Si
usted está practicando en el dojo y todo lo que hacen es tirar a la gente,
entonces es muy duro para los uchi-deshi, porque ellos estarán cayendo mañana,
tarde y noche.
Editor: Yo creo que
en ese tiempo estaban relacionados con el general Takeshita. ¿Fue también un
activo practicante?
Sensei: Oh, sí, él
era muy activo, por cierto. Parece que él también era muy conocido por el
actual emperador, que incluso llegó a preguntarle algo así como:
"Takeshita, ¿usted sigue entrenando Aikido?" Ahora, el Aikido se ha
convertido en un budo internacional, pero en el pasado era algo que solo los
que habían pasado por kendo y judo venían a aprender.
Editor: ¿Alguna vez
tuvo la experiencia de ser lanzada directamente por 0-Sensei?
Sensei: Sí, la
tuve, y no se anduvo con rodeos porque yo era una mujer. A menudo se oye decir
que en el Aikido el tamaño del cuerpo de uno no es tan relevante, pero creo que
es una desventaja cierta ser pequeño. Cuando se hacía de mi brazo, por lo
general podía envolverlo y tocarse la punta de los dedos. Luego, cuando yo
traté de agarrarlo, había una brecha en el mismo lugar. Tuve que usar las dos
manos para igualar su alcance con una sola mano. En un caso como este existe
una gran desventaja. Tuve que agarrar tan fuerte que acabé rígida y empecé a
preocuparme por ser inflexible.
Editor: Kunigoshi
Sensei, usted estudió dibujo en la escuela. Las ilustraciones que hizo para
"Budo Renshu" son obras de referencia muy valiosas.
Sensei: Cuando pienso
acerca de ello hoy en día, siento que lo hice bastante bien. En la escuela
había tomado un curso de diseño pero me ocupaba sobre todo con la moda. Cuando
hice los dibujos de las técnicas iniciaba con un círculo para la cabeza y
trazos para los brazos y las piernas y eso era todo, ya que sólo tenía uno o
dos segundos en el dojo para mirar el kata. Entonces me tomaba mi tiempo en
casa para añadir un kimono y hakama a las figuras. Los pergaminos makimono de
la Daito Ryu no son sino un punto negro para la cabeza y dos líneas para los
brazos y dos para las piernas. ¡Las figuras parecen hormigas! Algunas están
sosteniendo espadas.
Ahora, el Hombu se
ha convertido en un lugar muy fino con muchos Deshi. Por mi parte paso la mayor
parte de mi tiempo con la ceremonia del té, y cuando estoy sosteniendo el
recipiente de agua siento lo mismo que quien sostiene una espada. Tengo la
misma sensación y recuerdo las cosas que aprendí de O-Sensei. Sea que
practiques la ceremonia del té o el arreglo floral, hay puntos en común con el
Aikido, ya que el mundo entero (Tenchi) está formado por el movimiento y la
calma, la luz y la sombra. Si cada cosa se moviera y cambiara entonces todo
sería un caos completo, ¿verdad?
Editor: ¿Estas
ideas provenían de China?
Sensei: Sí, de
China, pero creo que los principios de cielo y tierra y el yin y el yan (o los
principios positivo y negativo) no se limitan sólo a China. Las palabras son
diferentes, por supuesto, pero esto es simplemente una cuestión de diferencias
en la expresión. Todas las naciones del mundo tienen la misma verdad, creo.
Cuando el sol está brillando debe haber sombras también. Creo que podemos decir
que lo mismo se aplica al Budo.