¿Sobrevive el bushidō o el espíritu samurái en la sociedad japonesa de hoy?
Tomado del texto Los Samurái: El pasado y el presente, del
Dr. Hiroaki Sato Febrero 2010[1]. El texto completo de esta conferencia se encuentra publicado en nuestra página www.bogotaikido.com
Las respuestas que he recibido evidencian que no hay una definición o concepto claro del bushidō, lo cual es comprensible.
Algunos de los que respondieron eran suficientemente conocedores para postular, en gran parte correctamente, que es un sistema de pensamiento fuertemente influenciado por la ética confuciana. Algunos han sugerido que el espíritu samurái está manifiesto en cosas tales como la dedicación leal a una causa, cualquiera que pueda ser dicha causa (incluyendo el fenómeno otaku), y la disposición de sacrificar los deseos personales por el bien mayor, sea para un grupo o una corporación.
La asociación del bushidō con la dedicación leal a una causa viene del dō, “el camino” (道; dao en chino), de bushidō—la idea originalmente budista, según lo entiendo, de que se puede alcanzar la iluminación dedicándose a una sola cosa. En este sentido, quisiera citar la respuesta de mi propio hermano Masamichi (政道), aunque en este caso la dedicación tiene que ver con trabajar en un grupo.
Masamichi trabajó con Toyota Motor durante cuarenta años hasta su edad de retiro obligatorio el año pasado; pero entonces una de las subsidiarias de Toyota le pidió que trabajara para ellos, así que él continúa haciendo el trabajo que hizo durante muchos años. A lo largo de los años en Toyota, él avanzó de jefe de sección, a jefe de grupo, a jefe de fábrica.
Reflexionando sobre cómo el espíritu del bushidō pudo haber influenciado el trabajo en Toyota, él concluyó que podría manifestarse en la ayuda mutua espontánea dentro de un grupo. Siempre hay alguien que se retrasa, ya sea porque no entiende bien su tarea o porque no es tan competente como algunos de los otros. Cuando se nota alguien así, los que están más adelantados o son más capaces lo ayudan voluntariamente, sin que se los pidan.
Toyota es un lugar notoriamente duro para trabajar, mi hermano me escribió. La reputación de la compañía es que, para la mejora continua de la productividad y el esfuerzo para alcanzar la perfección, conduce a sus trabajadores de la manera de “exprimir a las momias por sangre”. Pero sin el trabajo en equipo voluntario y espontáneo y los esfuerzos voluntarios y espontáneos para mejorar en cada grupo, Toyota no estaría donde está hoy en día, dijo Masamichi.
Muchas gracias.
[1] Hiroaki Sato (N. 1942), poeta japonés y prolífico traductor que escribe frecuentemente para The Japan Times. Profesor de literatura japonesa y director de investigación. Actualmente vive en Nueva York.