ENTREVISTA A YAMADA SHIHAN
Esta entrevista fue realizada por Michelle Feilen y Francisco Manchón (instructores-jefe de la Asociación Cultural Feilen Aikido) para la revista "Cinturón Negro - Budo Internacional". 2000.
A.C.F.A.- ¿Qué fue lo que le condujo a la práctica de Aikido?
Y.Y.S.- Mi tío, Tadashi Abe Sensei, era Ushideshi (estudiante interno) de O’Sensei con lo cual, ya desde mi niñez, tenía conocimiento del Aikido. Y siempre esperaba poder empezar a practicarlo. Cuando llegó el momento, empecé y eso es todo. Debido a los lazos familiares de mi tío con la familia de O’Sensei fui aceptado como Ushideshi. Mi situación fue distinta a lo habitual, mi primer día de Aikido fue también mi primer día de Ushideshi.
A.C.F.A.- ¿Recuerda la primera vez que vio a O Sensei? ¿Puede comentar ese momento?
Y.Y.S.- Ocurrió en una demostración, no pública, efectuada para un círculo familiar muy íntimo, en su casa. Yo fui invitado gracias al vínculo que tenía mi tío con la familia de O Sensei y como cualquier persona, me sentía tan emocionado que no me acuerdo prácticamente de nada más.
A.C.F.A.- Cuál es la enseñanza más importante que aprendió de O Sensei?
Y.Y.S.- Obviamente a parte del aspecto técnico, aprendí a ser una buena persona, generosa y gentil con los estudiantes.
A.C.F.A.- ¿Cree que el Aikido actual difiere mucho del que ustedes practicaban junto a O Sensei?
Y.Y.S.- Definitivamente sí. Si O Sensei viera la práctica actual se sorprendería mucho. Existen dentro del Aikido, muchas variaciones de carácter individual, muchos estilos. Esto es inevitable dada su naturaleza muy creativa. Lo importante es definirse por un estilo; todo el mundo es libre de seguir lo que le gusta, lo que es bueno para uno mismo. Hay muchas formas de seguir el Aikido. Nadie puede decir cual es la correcta y cual es la incorrecta. Es como la traducción de una gran obra. Siempre se pueden expresar distintos matices, distintas interpretaciones. Hay muchos traductores de O sensei y evidentemente la única manera de conocer a O Sensei y a su obra es a través de sus traductores.
A.C.F.A.- ¿Qué personalidades del Aikido han influido más en su desarrollo personal, tanto a nivel técnico como espiritual?
Y.Y.S.- Bien, personalmente considero que no copio a nadie. He intentado coger cosas de todo el mundo que son buenas para mí e integrarlas en mi persona, digerirlas al igual que una buena comida. Mucha gente opina que mi estilo es muy ortodoxo, de movimientos circulares y dinámicos siguiendo la línea de Kishomaru Ueshiba. Es lo que opina la gente.
A.C.F.A.- ¿Cómo definiría su técnica?
Y.Y.S.- Dinámica y elegante, bueno, por lo menos espero que sea así.
A.C.F.A.- ¿Qué representa Aikikai Hombu Dojo en nuestros días?
Y.Y.S.- Básicamente, Aikikai Hombu Dojo debería ser para nosotros un símbolo espiritual. Me apena que no exista esta relación entre Aikikai Hombu Dojo y los practicantes. Actualmente es más una relación de negocios (grados, certificados, etc.). Siento que el nexo espiritual se pierde. Aún así, todavía existe gente que siente esta relación pero también hay mucha a quien no le interesa. Esto podría representar un problema en el futuro, sobre todo cuando faltemos los nexos de unión: los traductores de O Sensei.
A.C.F.A.- ¿Qué opina sobre la proliferación de Federaciones y Asociaciones en todo el mundo siguiendo el estudio de diversos Shihans? ¿Cómo puede repercutir esto en la unidad del Aikido y su desarrollo en el futuro?
Y.Y.S.- Lo ideal sería una Federación que unificase todo, pero esto es absolutamente imposible. Es como lo de los estilos de Aikido. Ahora nos damos cuenta claramente de que es imposible y es ahora cuando tenemos que pensar cómo afrontar esta situación. Todos sabemos que no podemos unificar y sin embargo algunas entidades lo siguen intentando, como por ejemplo la International Aikido Federation (IAF). Todo el mundo tendría que tener derecho a ser miembro de la IAF.
A.C.F.A.- En su organización, todos los grados que usted otorga están certificados por el Aikikai. En Europa existen los grados nacionales otorgados por Federaciones, Asociaciones y los de Aikikai. ¿Cuál es su opinión sobre esta separación de grados?
Y.Y.S.- Entiendo que cada país tenga sus propias administraciones (distintos Ministerios, etc.). Algunos países no tienen otra opción, pero pienso que en la cuestión de los danes, estos deben proceder de la fuente original ya que tienen un significado espiritual. Para que esto sea posible, Aikikai Hombu Dojo debe ser comprensivo con las distintas problemáticas, debe ajustarse y flexibilizarse, ya que cada país vive distintas situaciones administrativas y financieras. Personalmente, siento que si Aikikai Hombu Dojo no hace nada al respecto para resolver este problema, cualquier país o los mismos Shihans otorgarán los certificados. Esto sucederá si Aikikai Hombu Dojo no ofrece alguna solución.
A.C.F.A.- Afortunadamente, sus visitas a Europa y especialmente a España, cada vez son más frecuentes. ¿Cómo ve la evolución del Aikido en Europa y especialmente en nuestro país?
Y.Y.S.- Europa, como continente, tiene una historia del Aikido muy larga pero al mismo tiempo muy confusa. Hay muchos Shihans y profesores. Obviamente existen muchos pensamientos, estilos y filosofías. Hoy en día hay más información, viajar es más fácil y la gente tiene la oportunidad de ver más Shihans, con lo que pueden acceder a distintas líneas de Aikido en todo el mundo. La gente tiene más oportunidades de comprobar lo que está pasando alrededor del Aikido, por ejemplo, en mi país (USA) los estudiantes no sólo me ven a mí y/o a los Shihan que hay en América, también tienen la oportunidad de ver a Tamura Shihan (Europa) o estudiantes que viajan de Europa a América. Reconozco que no estoy muy enterado de la situación en España, pero cada vez que vengo disfruto mucho enseñando. Siento que la gente de aquí tiene muchas ansias por aprender.
A.C.F.A.- Sus cursos se caracterizan, por lo que hemos comprobado a través de todo el mundo, por la asistencia de multitud de estudiantes de otros países. ¿Qué sentimiento despierta en usted el que estudiantes de puntos tan lejanos viajen para practicar bajo sus enseñanzas?
Y.Y.S.- Naturalmente, esto me hace muy feliz. Para mí significa que debo hacer bien mi trabajo. No solamente es bueno para mí, también es bueno para mi Dojo y mis alumnos que gente de todo el mundo venga tanto a mis Seminarios como a mi Dojo. Se crean vínculos de amistad.
A.C.F.A.- ¿Cómo ve la evolución técnica y espiritual de los altos grados a través de sus seminarios en todo el mundo? ¿Desearía darles algún consejo?
Y.Y.S.- Todos van por el buen camino aunque deberían volver de vez en cuando a las fuentes y ser más humildes.
A.C.F.A.- New York Aikikai se ha convertido, con el paso del tiempo (36 años de existencia), en un lugar de peregrinación para innumerables aikidokas de todo el mundo que van a su Dojo para profundizar en la práctica del Aikido. ¿Qué espíritu intenta usted inculcar en todos estos practicantes?
Y.Y.S.- Como he dicho anteriormente, siento un gran placer cuando veo gente de tantos países distintos venir a New York Aikikai. Pienso que no vienen sólo a verme a mí, también vienen para conocer a mis estudiantes, de los cuales estoy muy orgulloso. Mi Dojo tiene una atmósfera especial, no sé cómo describirla y no se cómo la he creado, pero mi lema es hacer que mi Dojo sea un lugar donde se pueda practicar sinceramente y a la vez se disfrute y de esta manera se creen lazos de amistad. Es bueno poder amar a los demás y sentirse a su vez amado. Quizás esa sea la atmósfera de la que hablábamos.
A.C.F.A.- ¿Qué objetivos le quedan por alcanzar en el mundo del Aikido?
Y.Y.S.- ¿Objetivos? Humm... Espero que algún día pueda tirar (proyectar) a la gente sin tocarla. (risas)
A.C.F.A.- Defíname con una sola palabra y en tres segundos las siguientes personalidades del mundo del Aikido:
Y.Y.S.- K. Ueshiba, un caballero,
K. Tohei Sensei, carismático,
O. Osawa Sensei, comprensivo,
N. Tamura Sensei, un gran trabajador,
M. Kanai Sensei, un samurai,
K. Chiba Sensei, apasionado,
Y. Yamada Sensei, flexible.